Apoyando al Rugby desde la base: Liga de Madrid JUVENIL: OLÍMPICO DE POZUELO gana in extremis al CRC CANOE: 22

Hoy, para hacer un buen y justificadísimo favor al delegado del equipo JUVENIL del CRC CANOE, me tocado sustituirle en el partido entre OLÍMPICO DE POZUELO y el CRC CANOE de la Liga de Madrid JUVENIL. Ha sido un partido increíble por la emoción del resultado y por la bravura de los jugadores que han saltado al terreno de juego. Aquí os dejo la crónica del partido.

Los detalles marcan las diferencias.

Antes del partido el cuerpo técnico del CRC CANOE intentaba transmitir a los jugadores que el partido iba a ser un partido en el que menos fallara se llevaría el “gato al agua”. Un encuentro de “batalla” para lograr ser la mejor defensa. Un partido de detalles.

Y así ha sido. La igualdad, en términos generales, ha sido máxima y solo hasta el último minuto del encuentro el resultado colgaba de la cuerda del destino para decantarse por uno u otro equipo.

El inicio, eso sí, fue espeluznante. El ritmo frenético que el OLÍMPICO marcaba al oval, ayudado por la caraja defensiva de nuestros chicos, hacía que pareciera que no estábamos en un partido entre dos de los cuatro mejores equipos de Madrid. Así en el minuto 7, OLÍMPICO lograba abrir la lata y anotaba su primer ensayo por parte de su ala izquierdo ante la relajación defensiva de los jugadores del CANOE.

El OLÍMPICO viendo sangre, intentó hurgar en la herida, pero gracias a Dios, a la Fortuna y a los aciertos defensivos de algunos jugadores, el marcador no se movió. Es que no la olíamos, no ganábamos ni una touch, las melés eran un suplicio…. pero, bueno, solo perdíamos de 5 puntos.

Sobre el minuto 15, empezamos a poder tener algún balón y, eso, nos permitió empezar a carburar. OLÍMPICO, en su línea de defensas agresivas pero nobles, empezó a cometer algún golpe de castigo pues quería seguir como al inicio. Así, en el minuto 17, Fran, inconmensurable hoy en el tiro a palos, lograba transformar el golpe de castigo y nos acercaba en el marcador, 5 – 3.

El juego de los últimos minutos y el anotar fue como un cambio radical para los jugadores del CANOE. La iniciativa empezó a ser solo del CANOE, con un Carlos Delgado muy dinámico en la dirección de una delantera compuesta por unos chicos que saben a lo que juegan, y con Borja haciendo mucho daño con sus patadas defensivas que ponían en aprietos a la defensa contraria. Además, todo el equipo empezó a placar de verdad y la agresividad en la conquista se recuperó totalmente.

Llegábamos con más o menos asiduidad a la veintidós contraria y en una de esas llegadas, Alex Cantarero, en el minuto 22, lograba anotar un ensayo pleno de fuerza y habilidad tras sacar rápidamente un golpe de castigo a 5 metros de la línea de marca. Fran anotaba la transformación y ponía el resultado en un 5 – 10 que plasmaba, blanco sobre negro, la reacción del CANOE aunque pareciera increíble tras los primeros doce minutos de partido.

Es cierto que OLÍMPICO no bajaba en su ímpetu y, fruto de ello, tuvieron la oportunidad de anotar dos golpes de castigo en los minutos 25 y 31. Fallaron en ambos.

Por el contrario, Fran acertó de nuevo en el minuto 34 en una nueva patada tras golpe de castigo de la defensa del OLÍMPICO y dejaba el marcador al llegar al descanso en un esperanzador 5 – 13.

El inicio de la segunda parte fue un calco de lo acontecido en la segunda mitad de la primera parte y, además, en el minuto 36, Fran volvía a anotar otro golpe de castigo que abría aun más el marcador, 5 – 16.

OLÍMPICO pugnaba por volver al partido. Su zaguero y sus alas siempre causaban bastante peligro en sus incursiones aunque eran bien paradas en la primera o en la segunda cortina.

En el minuto 48, ocurría un hecho que puede haber sido determinante para el devenir posterior del partido. Fran se resentía de unas dolencias que arrastraba en su cadera y tuvo que ser sustituido. Fran, aparte de haber estado inmaculado en su faceta de lanzador (cuatro de cuatro esta mañana), había sido muy incisivo en ataque incrustándose casi siempre con acierto en la línea de tres cuartos y, sobre todo, había aportado un gran nivel defensivo en su puesto, hoy, de zaguero.

Estaba claro que la diferencia en el marcador era grande pero que OLÍMPICO iba a intentarlo sin descanso, hasta el final, como suele ser norma en ellos. Tocaba defender e intentar parar el partido. Desgraciadamente en los minutos 50 y 58, OLÍMPICO lograba anotar dos ensayos con la inestimable pasividad defensiva canoísta (sobre todo en el segundo de estos ensayos) y el marcador se ponía en un ajustadísimo 15 – 16.

CANOE sobrevivía, defendiendo en general bien salvo en las jugadas en las que venía un jugador lanzado (algo a mejorar el que el equipo suba en “muro” tras una patada defensiva). Incluso, pudimos aumentar la ventaja en un golpe de castigo que Borja intentó transformar desde 40 metros algo lateral. El oval pasó cerca del poste izquierdo. Era el minuto 67.

Y llegó la jugada del partido. Un minuto para terminar el encuentro. Melé a favor nuestro en la veintidós contraria. Ganamos la melé, bien. Balón controlado, bien. Nuestro ocho, Francisco Nodrid, sale perfecto y sobrepasa la línea de melé pero se abre demasiado y es placado sin los apoyos necesarios. Nos roban el oval. Porca miseria, debíamos haber cerrado el partido con fases cortas, protegiendo el oval, hasta anotar (estábamos a 15 metros) o agotar el poco tiempo restante. OLÍMPICO, en vez de jugar a la mano, lanza una patada defensiva para que su ala izquierdo presione e intente robar el oval. Bien. Lo que parecía un regalo para el CANOE, se convierte en un golpe de fortuna para el OLÍMPICO pues el aire nos juega una mala pasada y el ala “olímpico” coge el balón tras un par de botes descontrolados. El ala inicia su carrera y, ante la oposición de nuestro último hombre, lanza una patada profunda desde nuestra 40. A pesar del fuerte viento lateral reinante (que había sacado la mayoría de los balones por esa banda), el oval bota en vertical y avanza. Los dos jugadores corren como posesos pero el del OLÍMPICO logra “cazar” la bola en la zona de marca y consigue el ensayo definitivo. El ensayo que le da la victoria al OLÍMPICO pues deja el marcador en 22 – 16.

El árbitro, con todo, deja que saquemos de centro, logramos ganar el salto tras el buen saque de Borja, pero, lamentablemente, terminamos por perder el oval tras un par de fases en las que intentamos ensayar a la desesperada.

El resultado justo. Al igual que hubiera sido justa la victoria del CANOE. Los detalles, esta vez, han sido para ellos. El detalle de tener los medios necesarios, un buen paquete de delanteros (que saben lo que hacen) y un buen medio de melé, y no aprovecharlos para “cerrar” el partido a falta de un minuto y en la veintidós contraria. Lo de la patada, los botes, etc, son meros caprichos del destino que, a veces, juega con nosotros y nos castiga y, otras, nos premia.

Con todo, hay liga. Quedan cinco partidos de esta segunda fase y, a pesar de las bajas (hoy un flanker ha tenido que jugar de ala, Fran de zaguero, hasta cinco cadetes en la convocatoria, dos de ellos titulares…..), este equipo hoy se ha demostrado a sí mismo que está ahí, que sabe competir de tu a tu contra cualquiera.

La semana que viene, el partido contra ALCOBENDAS hay que plantearlo como en el de la Fase Regular, defensa, defensa, defensa y …. aprovechar nuestras oportunidades, los detalles, y no regalar nada, como hoy. Ellos vienen crecidos (hoy le han metido 33 – 0 al LICEO FRANCÉS) pero la jornada anterior le ganaron solo de cinco puntos a OLÍMPICO. Si se quiere, se puede.

Alineación: